Plante de policías ante una orden envenenada
CONSIDERAN ILEGALES LAS REDADAS DE INMIGRANTES 
LA REBELIÓN de agentes contra la orden de la Comisaría General de Extranjería que les emplaza a practicar detenciones preventivas de inmigrantes para comprobar si tienen papeles debe llevar a Interior a demostrar que ésa es una práctica que se ajusta a derecho. El sindicato mayoritario entre los policías, el SUP, advirtió ayer que el sistema de redadas indiscriminadas es ilegal, y que el Tribunal Supremo ya ha dejado sentado que para identificar a un ciudadano debe existir «un indicio racional» previo de la comisión de un delito.Tan es así, que aseguran que varios agentes han sido denunciados y condenados por estos hechos, lo que conlleva su expulsión del Cuerpo. Con estos precedentes es lógico que los policías muestren sus reticencias a obedecer a sus mandos, cuando no su abierta oposición. El SUP lo tiene tan claro que está preparando varias iniciativas ante los tribunales. La respuesta de Rubalcaba debería ser la de probar que no tienen razón, con el objetivo de zanjar lo antes posible este incidente. En caso de no hacerlo, tendría que retirar esta polémica orden.
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